sábado, 2 de agosto de 2008

La princesa de Disney se rebela


No se sabe si juega al despiste o simplemente vive las contradicciones propias de una adolescente. El caso es que Miley Cyrus está volviendo locos a sus seguidores con sus mensajes contradictorios a vueltas con su postura frente al sexo. Al tiempo que dice que quiere zafarse de su imagen en la serie anunciando que participará en películas en las que aparecerá desnuda, luce un anillo en señal de pureza y releva a Britney Spears como abanderada de la virginidad hasta después del matrimonio. Tantas declaraciones aparentemente incompatibles sólo encuentran una justificación: la niña bonita de Disney está en plena promoción de su último disco, «Breakout» -el primero que lanza sin el manto protector de su alter ego, Hannah Montana-, y sus asesores de prensa le han debido decir que cuanto más jugosas sean las frases que pronuncia, más escalará en la lista de éxitos. Ella, mientras tanto, no disimula su ambición. No quiere quedarse sólo en una estrella para adolescentes con cuyas fotos forrar sus carpetas, desea ser una celebridad con más recorrido. Por eso, en «Breakout» se reivindica como compositora. «Escribí todas las canciones del álbum menos dos y puedo decir que es un trabajo muy maduro», ha declarado. La cuarta temporada Puede que sea así. Mientas tanto, parece que no está dispuesta desprenderse del papel de Hannah Montana, ya que próximamente empezará a rodar la cuarta temporada de la serie. A fin de cuentas, en su anterior gira musical, avalada por su personaje, la estrella del espectáculo, tuvo unos ingresos superiores a los 36 millones de dólares en venta de entradas y ahora no le va a ir peor: «Breakout» ya esta en la lista de los discos más vendidos y, el jueves pasado, colapsó Nueva York con una actuación en directo en la plaza del Rockefeller Center. Lo que pocos ya dudan a estas alturas es que Miley Cyrus sabe, cuando le conviene, cómo convertir cada una de sus frases en un titular que las adolescentes analizarán con lupa. Cyrus no quiere ser ya la niña asexuada con la que muchos la identifican. Pero tampoco desea que la transición sea traumática. Así, confiesa que es una gran admiradora de «Sexo en Nueva York» por su erotismo y la libertad sexual de sus protagonistas, aunque su favorita, como no podía ser otra, es la pudorosa Charlotte, como ella misma ya se encargó de subrayarlo. También dejó que se filtrase a la Prensa, vía «Vanity Fair», que su crecimiento como actriz pasa por películas más atrevidas, por lo que se está pensado aceptar el papel protagonista de «Undiscovered Gyrl». En ella encarnaría a una chica que vive en los suburbios, bastante promiscua y cuya única ocupación es ir de fiesta en fiesta. Su representante aseguró que en la película habría escenas de desnudos. Al tiempo, Cyrus defiende la castidad, una opción que eligió por sí misma, y por su familia. «La pureza para mí es un valor, por eso tengo la intención de evitar el sexo premarital a toda costa», declaró a la revista «TV Guide». El tiempo dirá cuál de las dos Miley Cyrus es la real o si la imagen que proyecta responde a las necesidades de su público. Por ahora, como Britney en su día, juega a dar una de cal y otra de arena.

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